Pascua. La leyenda del huevo que sostiene en su mano Sta. María Magdalena.

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        María Magdalena fue una figura clave en la Resurrección de Cristo, y por ello quiero recordarla hoy en este Domingo de Pascua que celebramos.

       Según los Evangelios, Magdalena fue una de las seguidoras más fieles de Jesús, cuya crucifixión, sepultura y resurrección presenció en primera persona.  Fue ella la primera en anunciar la Resurrección de Cristo,  la primera que vio el rostro del Resucitado entre los muertos,  la primera a quien Jesús llama por su nombre., y fue ella quien lo anunció a los Apóstoles.

María Magdalena era una mujer muy valiente, y tanto fue así, que incluso fue a visitar al Emperador Tiberio de Roma.

 Referente a este encuentro, existe una legendaria tradición cristiana, una historia “apócrifa”, que con motivo del día en que estamos quiero contaros, y en donde se ve claramente, el significado del “famoso huevo blanco”, que muestra el Arcano de la Sacerdotisa o Papisa, en el Tarot de Marsella (de este Arcano hablaré extensamente más adelante analizando todos sus símbolos. Hoy solo haré referencia al huevo).

      La leyenda nos cuenta que cuando María Magdalena llegó a la presencia del emperador Tiberio, en el momento de anunciar la Resurrección de Cristo, tenía en sus manos un huevo blanco. Se lo ofreció diciéndole: “Cristo ha resucitado”.

    Incrédulo,  el Emperador se burló de ella y la dijo:

    “Que  Jesús haya resucitado es algo tan imposible de creer, como que el huevo que tienes en tus manos se vuelva de color rojo.”

     La tradición comenta que el emperador aún no había acabado su frase, cuando vio el huevo teñirse de rojo. De esta manera, María Magdalena tuvo la posibilidad de dar el mensaje de Jesús a la familia del Emperador.

     Y aunque no hay certeza histórica de este suceso, desde entonces los huevos rojos son símbolo de Pascua en muchos países del mundo, y es raro que se vea un icono de esta Santa, en el que no aparezca con el huevo sosteniéndolo en una de sus manos, bien en color blanco, o bien en color rojo.  En el arte cristiano, el rojo, representa la caridad y el amor.

     Conviene saber también, que la simbología del huevo, realmente va muy unida a la de la Resurrección, porque la Pascua coincide con el resurgir de la Naturaleza, la primavera, después del largo letargo invernal. Simboliza la nueva vida y a Cristo emergiendo de la tumba,de hecho, los cristianos ortodoxos acompañan esta tradición con la consigna: “¡Cristo ha resucitado!” El huevo desde muchos siglos atrás ha simbolizado la fecundidad, la vida y la renovación, por tanto, la asociación Pascua y huevo, no puede ser más certera o ideal.

      Además, el huevo representa a los 4 elementos de la vida o de la naturaleza. La cáscara representa al elemento tierra, la membrana, al elemento aire, la clara el elemento agua, y la yema el elemento fuego.

       Para algunos “La Magdalena” fue la esposa de Jesucristo, para otros su discípula más amada, una mujer que llegó a alcanzar la iluminación.

      El huevo rojo que sostiene María Magdalena, puede ser el secreto de un conocimiento que se niega a desaparecer y resiste en el tiempo. 

     Para la mayoría, es el eslabón que faltaba en la  larga cadena de eslabones que es la historia de Jesús.

La que llamaban “prostituta”, se alza desde el año 2016 como apóstol apostolurum, “la Apóstol de los Apóstoles”, en definitiva, «La Papisa».

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