En éstas fechas, en la que se nos está bombardeando por diferentes medios de comunicación, y también desde los centros comerciales con el ya, por desgracia, «famoso» Halloween, no me queda otra que hablaros de lo que me parece a mi ésta «Festividad» muy «desconocida» por la mayoria de personas que la secundan o la siguen, y lo cierto es que digo desconocida, porque realmente pocos saben que hay detrás de ésta «Fiesta», que no es una Fiesta de la «luz» precisamente.
Solo basta con preguntarles a algunas amistades mías si van a celebrarla, y por qué la celebran, a lo que te responden cosas como:«Si, es divertido» «Es que lo hace todo el mundo» «Está de moda» «¿Qué tiene de malo divertirse?». A continuación la siguiente pregunta es «¿Peró tú sabes lo que atraes cuando te pones un disfraz como el que te vas a poner, y te reúnes con gente que va igual»? «¿Sabes las raíces de ésta «Fiesta» y lo que acarrea seguirla?». Respuesta: NO, sólo sé que es divertido y es lo que importa.
Claro, cuando recibes ésta respuesta de varias personas, te quedas bastante «alucinada», porque celebrar una «Festividad» de la cual ignoras todo y solo lo haces por diversión y/o por «ir a la moda», vamos mal, muy mal. Qué menos que poner interés en lo que desconoces, para sobre todo saber si te conviene, o no te conviene seguir o celebrar ésta «Tradición tan divertida», máxime si fueras o eres creyente en Dios, porque lo mismo vas a «celebrar algo» que a los ojos de Dios no es nada positivo, como voy a explicaros en ésta entrada. Y si no eres creyente de nada, no crees en Dios, o en la Fuente, o como quieras llamarlo, la pregunta sería ¿Por qué celebras una Tradición religiosa pagana?, si no crees en nada, nada deberías de «celebrar». Sería un contrasentido en éste último caso.
Para que se vaya conociendo más, ésta ya popular «Tradición», deciros que Halloween es una fiesta que se celebra en gran parte del mundo occidental, sobre todo en los paises anglosajones, la noche del 31 de octubre, víspera del Día de Todos Los Santos (1 de noviembre). Sus orígenes se remontan a los celtas, y la fiesta fue exportada a los Estados Unidos por los emigrantes irlandeses en el siglo XIX, más o menos por 1846. Debido al imperialismo cultural de los Estados Unidos en el resto del mundo, ejercido através del marketing de sus empresas multinacionales, y de las películas de Hollywood, Halloween se ha popularizado también en otros países, pese a que mucha gente la sigue considerando una fiesta estadounidense, sobre todo, donde se tiene más costumbres arraigadas para este mismo día.
La historia del Halloween se remonta a más de 2.500 años. Los antiguos pueblos celtas, que rechazaban el Cristianismo, ya que ellos tenían su propia «religión» basada en la Naturaleza y en varios Dioses distintos, llegado el final de Octubre solían celebrar una gran fiesta para conmemorar “el final de la cosecha ” y el culto a los muertos, bautizada con la palabra gaélica de «Samhain». Significa, etimológicamente, ‘el final del verano’. Por tanto, el «Samhain», vendría a ser la «nochevieja» celta, pero en éste caso, una nochevieja llena de miedo y de superstición. Si bien se sabe poco de estas celebraciones, parece que las festividades del Samhain se celebraban muy posiblemente entre el 5 y el 7 de noviembre (a la mitad del equinoccio de verano y el solsticio de invierno) con una serie de festividades que duraban una semana, finalizando con la fiesta de «los muertos», que daban inicio al año nuevo celta.
El ganado era rejuntado de los prados en los establos. En el último día, se suponía que los espíritus podían salir de los cementerios y apoderarse de los cuerpos de los vivos para resucitar. Para evitarlo, los poblados celtas ensuciaban las casas y las «decoraban» con huesos, calaveras y demás cosas desagradables para que los muertos pasaran de largo asustados y así evitar ser desposeídos de sus cuerpos por los espíritus de los muertos. De ahí viene la tradición de decorar con motivos siniestros las casas en la actual víspera de todos los santos. Como también los disfraces. La tradición de las calabazas viene de que antiguamente se ahuecaban nabos y se les colocaba una vela para espantar a los malos espíritus. Había quienes creían que la vela representaba un alma atrapada en el purgatorio. Con el tiempo, los nabos fueron sustituidos por calabazas. . Samhain, ahora Halloween, es una fiesta dedicada a la muerte, y a la venida de los dioses paganos a la vida.
Por todo ello, Halloween es una fiesta basada en el miedo, la muerte, los muertos vivientes, la magia negra y los monstruos místicos. Los «personajes» que se suelen asociar a Halloween incluyen a los fantasmas, las brujas, los gatos negros, los trasgos, los banshees, los zombis y los demonios, así como ciertas figuras literarias como Drácula y el monstruo de Frankenstein principalmente.
En el Siglo VII, y para desterrar todas éstas creencias paganas, el papa Gregorio IV instituye el día 1 de Noviembre, como el día de Todos los Santos, una fiesta anual para honrar a los mártires. Cuatro siglos más tarde, se establece el 2 de Noviembre, como fecha para celebrar el día de los Difuntos. Y ésto si que merece especial atención, porque si el día 2 de Noviembre es el Día de los Difuntos, la noche real de los muertos, no sería la noche del día 31 de Octubre al 1 de Noviembre, sino la noche del día 1, al día 2 de Noviembre, pero en esa noche «no se celebra nada».
Los seguidores de la religión wicca —que practican brujería y ritos celtas— siguen llamando a la noche de Halloween por su nombre antiguo, Samhain, y la consideran la más sagrada del año. El diario USA Today citó las siguientes palabras de una bruja: “[Los cristianos] no lo saben, pero están celebrando con nosotros nuestra fiesta […], y nos encanta”.
La fiesta de Halloween, es decir “el festival de Samhain”, todavía es hoy celebrado oficialmente por los satanistas, ocultistas, y adoradores del diablo como la víspera del año nuevo de la brujería. El mismo Antón Lavey, autor de la “biblia satánica” y sacerdote alto de la iglesia de Satán, dice que hay tres días sumamente importantes para todo satanista y el día más importante de todos es HALLOWEEN.La iglesia satánica asume como suya esta fiesta.
Desde el 5 de septiembre hasta el 9 de noviembre la iglesia satánica cumple las siguientes celebraciones, que se mezclan y aplican a los festejos del halloween y día de muertos:
- Ayunan para buscar la voluntad de Satanás.
- – Elección de sacerdotes confesores para escritos en el libro del “macho cabrío”.
- – Ritual para maldecir el cuerpo de Cristo.
- – Reunión para preparar el día del Samhain.
- – Reflexión, disciplina, ayunos y mantras.
- – Ritos tradicionales.
- – Confesión de los pecados contra Satanás.
- – Bendicen a los integrantes de los grupos musicales y de artistas satánicos.
- Ordenan a los ministros del rock, músicos, “managers”, promotores, etc. involucrados en el satanismo.
- – Ritos bautismales, maldicen cualquier contacto que hallan tenido con cualquier cristiano, luego se bautizan con agua de alcantarilla, sangre de niños y de adultos sacrificados.
- Octubre 31: Inscripción en el libro del macho cabrío, comienza para ellos el año satánico, se invoca el poder total de Belcebú, Nostradamus y otros demonios.
- Noviembre 01: Se sella a los satanistas, a los espíritus de los muertos para sacarlos del purgatorio. Es decir, que entregan ofrendas, altares y recuerdos a los muertos para que sean altares para la invocación a los demonios.
- Noviembre 02 al 09 Semana de las bodas a Satanás.
Si es una «fiesta» que se basa en todo lo anteriormente dicho, como así es, obviamente no hay que ser ningún «genio», para saber que todo en lo que se basa no es algo positivo, sino muy al contrario, estamos viendo que las raíces de ésta Tradición, son francamente negativas, pero ¿Qué importa?, «lo que importa es divertirse y estar a la moda».
Pero, si importa y mucho, porque lo que probablemente no sabes, lo que seguramente no sabéis, es que cada uno atrae a su vida lo que manifiesta, y si manifiestas oscuridad, eso es lo que atraerás. Pura ley de atracción. Así como un ambiente de reverencia en un lugar de adoración, es conducente para atraer fuerzas divinas positivas, los elementos de esta tradición contribuyen activamente al incremento de la actividad de energías negativas como los fantasmas.
Los celtas eran muy supersticiosos,y tal y como explicaba antes, pensaban que decorando sus casas con motivos espantosos, o vistiéndose con ropas también terroríficas, iban a pasar desapercibidos para todos esos espíritus que tanto temían, al parecerse a ellos «externamente», pero estaban muy equivocados en ésta creencia, porque precisamente queriendo parecerse a ellos, lo que se consigue precisamente es eso, parecerte tanto, que te ven perfectamente porque te pones a su bajo nivel de vibración energética y es cuando se te pueden «pegar» o «adherir» a tí, a tu campo energético, y puede ser que a tu vida en definitiva, .
Siempre debemos tener en cuenta, que dónde esté presente cualquier cosa, lugar, palabra, creencia o persona relacionada con «Dios», su energía divina también está presente. Es decir, en dónde hay luz, encontrarás luz y atraerás luz.
Similarmente, donde existe cualquier cosa, lugar, palabra, creencia o persona que se relacione con fantasmas (demonios, diablos, energías negativas, etc.) como en Halloween, su energía negativa también está presente. Como la forma y el color de las decoraciones y disfraces utilizados en Halloween son similares a la forma y color de los fantasmas, estos actúan como antenas (conductos de frecuencias similares) para atraer mucha energía oscura.
De todo ésto, se deduce por tanto, que la fiesta de Halloween fue creada por energías negativas con el objetivo de generar y dispersar su energía negra negativa en la sociedad. Muy a menudo energías negativas como los fantasmas, demonios, etc. introducen pensamientos en la mente de las personas para dar inicio a tradiciones que están impregnadas de energía de baja vibración de manera que puedan influir a través de ellas sobre la gente.
Existe una ley que afirma que los similares se atraen. Entonces, aquellas personas que tienen una afinidad por los disfraces demoníacos, o terroríficos, realmente tienen esa afinidad, porque éstas personas están en una baja vibración energética. . Tales personas tienen mayor probabilidad de ser afectadas o poseídas por energías negativas. Las energías negativas que las afectan influyen en sus pensamientos y los incitan a participar en tales actividades.
Con la comida que se sirve en Halloween, pasa más de lo mismo. Si es comida con formas terroríficas, esa comida atraerá más energía negra, que tú te vas a comer y se instalará en tu organismo, pero ¿Qué divertido verdad?.
Los niños son los más afectados por las energías negativas, ya que son demasiado inocentes, y no tienen aún un fuerte escudo energético que les proteja de los fantasmas, o de las energías de tan baja vibración, de las cuales serán presas fáciles si sus padres les quieren introducir en éste «tan tremendamente divertido Festiva de Halloween».
Además, a los niños se les enseña a ir de puerta en puerta para recolectar dulces y advierten que si nos los reciben pueden hacer bromas a las personas que rehusan a dárselos. El resultado de ésto es muy negativo, ya que se les están inculcando valores erróneos, en la mente de los niños. «Si no me das lo que quiero, te haré algo que no te va a gustar, y si me lo das, te dejo en paz», ésto no está bien en absoluto.
Richard Evans, deja un testimonio muy claro sobre ésto: «Yo fui iniciado en Halloween en 1959. Tenía cuatro años de edad. Mi abuela en aquel entonces, me dejó elegir mi primer disfraz para ésta Festividad. Fui directamente a por una máscara de Diablo de látex color rojo, que me cubría toda mi cabeza, parecia muy realista, y venía con una brillante capa roja de rayón. Cuando me lo puse me sentí transformado en algo más poderoso que mis cuatro años de edad. Después de la noche de Halloween, mi abuela tuvo que tirarlo porque yo persistía en seguir llevándolo puesto contínuamente, alrededor de la casa y en el patio.
Los vecinos estaban empezando a hablar. Años más tarde aprendí en un curso de antropología que la máscaras, cantos y bailes universalmente se usan para invocar espíritus. “La persona que lleva la máscara se siente internamente transformada y asume temporalmente las cualidades del Dios o demonio representado por la máscara” (Biedermann, Hans. Diccionario de simbolismo, p. 218)»
¿Qué tiene de divertido disfrazar a los niños o decorar la casa con personajes que representan el mal,la tiniebla, lo opuesto a Aquel que es la Luz del mundo, enemigos del Señor en quien creemos?
¿Qué es lo mejor qué puedes hacer llegados a éste punto? Si participas en la fiesta de Halloween se incrementa notablemente la probabilidad de ser afectado o poseído por fantasmas. Entonces, lo mejor que puedes hacer es alejarte de cualquier festividad como ésta y educar a otros sobre sus efectos negativos . Por ejemplo, puedes compartir ésta entrada con todos tus amigos, conocidos y familiares de los peligros y riesgos que acarrea «celebrar ésta Festividad».
Otra cosa que puedes hacer y aquí en España al menos, está empezando a celebrarse más cada año, ya que gracias a Dios (y nunca mejor dicho), está cogiendo poco a poco cada vez más popularidad, es celebrar el «HOLYWINS», que quiere decir «La Santidad vence». Es una iniciativa de la Iglesia Católica, que a mi particularmente, me encanta, y conste que no es que me gusten muchas de las cosas que hace la Iglesia precisamente, pero ésta en concreto, sí me gusta y mucho, porque es la otra cara de la moneda. En el Holywins, se celebra la luz, la vida, la alegría, la santidad, por tanto es una Festividad de muy alta vibración energética o espiritual. Es la antítesis del «HALLOWEEN».
Ésta iniciativa comenzó hace ocho años, en la diócesis de Alcalá de Henares, Madrid, (España) y con ella, se anima a los más pequeños a vestirse de sus santos preferidos y a recordar en ese día sus vidas ejemplares a través de juegos, testimonios y canciones en el día de Halloween.
Lo que se pretende con esta propuesta es transformar una costumbre pagana hacia una cristiana, que además revele la vida de los Santos que son los homenajeados.
Los Santos son ejemplo reales y no fantasiosos de vida. Y es bueno darlos a conocer y mostrar al mundo cuales son los frutos de la Iglesia, pues ellos son nuestras primicias para Dios.
Éstas actividades son fruto del Espíritu Santo, puesto que no van en contra de la Doctrina de la Iglesia ni del Evangelio; y además, fomentan las virtudes de los Santos que fueron y siguen siendo luminarias para la Iglesia y para el mundo mismo; Mt 5, 13-16.
Este año, la diócesis ha decidido ampliar su llegada y también han organizado una serie de actividades para adolescentes.
Desde la Diócesis explican que: «No pretendemos ir contra Halloween, pero tampoco queremos compartir el culto a la muerte y la exaltación de lo monstruoso o feo que trae consigo, pues lo propio de los cristianos es celebran el triunfo de la vida y promover la belleza y el bien», señalan los organizadores.
«Por ello, frente a los disfraces de los muertos vivientes que llenan las calles de las ciudades los 31 de octubre, cada vez son más las diócesis que se suman a la celebración de Holywins para transmitir un mismo mensaje: la vida es hermosa y su meta es el Cielo, son muchos los que ya han llegado y todos estamos llamados a compartir su felicidad, pues todos podemos ser santos», resaltan.
Y es cierto, todos podemos ser santos, porque todos tenemos la chispa divina en nuestros interior, ya que somos todos Hijos de Dios, lo que falta es que nos lo creamos. El día en que eso suceda, Halloween habrá perdido toda su fuerza y desaparecerá, porque la luz habrá vencido a la oscuridad al fin.
La pregunta que surge de ésta reflexión es ¿Hacia dónde se está encaminando el hombre, que cada vez cobra más relevancia ésta «celebración del Halloween» en el Mundo?. Está claro que cada vez se está alejando más del «camino luminoso» y ésto, es muy preocupante….